El espectáculo celestial del ‘señor de los anillos’
El verano astronómico se iniciará en el Hemisferio Norte el día 21 de junio a las 0.34 hora peninsular (23.34m del día 20 en Canarias), momento en el que el Sol se encontrará exactamente en el Trópico de Cáncer. Ese día, el más largo del año, durará en Madrid 15 horas y 3 minutos, mientras que la noche apenas llegará a las 9 horas. En el solsticio de verano, al mediodía, el Sol alcanza su máxima elevación sobre el horizonte. Esta posición tan alta no cambia apreciablemente durante varios días, y de ahí proviene el término “solsticio” que significa “Sol quieto”.
El plenilunio tendrá lugar el día 20 en la constelación de Sagitario, mientras que el novilunio será el 5 con nuestro satélite en Taurus. La Luna alcanzó el perigeo (punto de mayor acercamiento a la Tierra) el día 3, a 361.126 kilómetros de distancia, y se encontrará en el apogeo (punto de mayor distancia a la Tierra) el día 15, a 405.057 kilómetros.
Venus sigue estando inobservable, pero Junio será un buen mes para contemplar otros cuatro planetas. Marte, aún cerca de la oposición (por la que pasó el 21 de mayo) seguirá brillando generosamente. Permanecerá visible durante toda la noche del Sur al Sudoeste. Júpiter será visible durante la primera parte de la noche, y muy brillante, desde el Sudoeste al Oeste. El pequeño Mercurio se verá hasta el día 20, en los amaneceres, muy bajo por el este. Pero recuerden que observarlo no es fácil. Sobre todo, se necesita un horizonte bien despejado de árboles, edificios, montes y cualesquiera otros obstáculos. Hay que estar atentos aproximadamente una hora antes de la salida del Sol explorando el horizonte, según se ilumina, del este al noreste.
Saturno se observará durante toda la noche, atravesando la bóveda celeste del Este al Oeste, y todas las noches del mes. Para ver los anillos y las grandes bandas nubosas que recorren la superficie del planeta hay que recurrir a un telescopio que tenga al menos 30 aumentos. Con un gran telescopio se pueden distinguir también las divisiones entre los anillos y las numerosas lunas (entre ellas Titán) que rodean al planeta.
Hacia la medianoche del jueves 16, viernes 17 y sábado 18 de junio, la Luna ya casi llena sigue su camino desde Libra hacia Ofiuco, por una zona en la que también se encuentran Marte y Saturno, ambos muy brillantes. El día 16, la Luna estará cerca de Marte, mientras que el sábado 18 estará particularmente cercana a Saturno. Por debajo de estos dos planetas brillará la estrella Antares, la más brillante de Escorpio, con su particular tono rojizo. El titilar de Antares contrasta con los brillos estables de Marte y Saturno, pues los planetas -por encontrarse mucho más cercanos y tener una imagen extensa- no parpadean.
El inicio del verano es un buen momento para disfrutar de las noches y contemplar el firmamento, las horas de oscuridad no son muchas, pero amables por las suaves temperaturas que invitan a disfrutar del aire libre y del cielo nocturno. Conviene disfrutar de ellas particularmente a mediados de este mes de junio, cuando Marte, Júpiter y ‘el señor de los anillos’, Saturno, compondrán con la Luna muy bellas estampas.
https://youtu.be/lBxkKDNz8dE