Cinco alimentos para combatir el Síndrome Premenstrual
Se estima que el 80% de las mujeres en edad reproductiva padece alguno de los síntomas del síndrome premenstrual, conocido también por sus sigas SPM. Y aunque no todos los que aparecen pueden considerarse lo suficientemente graves como para ser diagnosticados como tal, la doctora Carmen Menéndez, ginecóloga y directora del Instituto Palacios de Madrid, admite que son muy pocas las afortunadas que se libran de sufrir alguna molestia durante los ciclos menstruales.
La especialista reconoce que, a pesar de que no existe un tratamiento que acabe con todos los problemas generados por el SPM, hay varios factores que influyen de manera determinante en el desarrollo de sus síntomas. En este caso, Menéndez hace seis recomendaciones alimenticias para combatir sus efectos más negativos.
- Mejor soso que salado. El exceso de sodio en las comidas favorece la retención de líquidos que normalmente acompaña a la menstruación. Por eso, evitar productos enlatados, sazonadores y embutidos será una gran ayuda para evitar, entre otras cosas, esos kilos de más.
- Plátanos, los mejores aliados contra el mal humor. El triptófano presente en esta fruta actúa en el sistema nervioso favoreciendo el aumento de seratonina, que a su vez produce una enorme sensación de bienestar. Además, su variado aporte de vitaminas y minerales hacen del plátano un alimento muy completo y nutritivo, ideal para prevenir calambres musculares y eliminar líquidos gracias a su alto contenido en potasio.
- Más agua y menos refrescos. Cuando se retienen líquidos, la solución no es dejar de beber sino todo lo contrario. El agua ayuda a reducir la sensación de hinchazón, a eliminar toxinas e incluso a tener una piel más sana, tersa y radiante.
- Comidas más verdes y bajas en grasa saturada. Una alimentación saludable basada en verduras y carnes magras es la más recomendable para estos días del mes en los que el cuerpo es más propenso a darse ‘atracones’ y a acumular grasa. La proteína, y sobre todo los vegetales, ayudan a reducir la sensación de hambre, aportando además muy pocas calorías a la dieta.
- No quitarle hierro al asunto. Un estudio publicado en la revista American Journal of Epidemiology llegó a la conclusión de que las mujeres que consumían cantidades más grandes de hierro reducían hasta en un 30% el riesgo de padecer este síndrome. Además, el sangrado puede provocar una bajada de los niveles de este mineral en el organismo, siendo aconsejable añadir al menú alimentos ricos en él, como espinacas, legumbres, almendras o almejas.
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